4 palabras que cambian cada situación

4 palabras que cambian cada situación

                            
                             

¿Alguna vez has tenido uno de esos, «Woah, espera un minuto!» veces al leer la Biblia ? Poco a poco te abres paso a través de un capítulo, tratando de despejarte la cabeza empañada por el sueño, cuando de repente un verso salta y te golpea en la cara. Tuve uno de esos momentos esta mañana.

 

Estaba abriéndome camino a través de Salmos 54 , tratando de sacudirme un ligero dolor de cabeza, cuando leí Salmos 54: 4 :

 

«He aquí, Dios es mi ayudante …»

 

 

Bam! Versículo de la Biblia en la cara (de una manera buena y dulce). Las palabras «Dios es mi ayudante» son asombrosas. Piensa en ellos por un momento. Literalmente cambian cada situación. Dios, el Dios del universo, omnipotente, omnisciente, amoroso, justo, verdadero, ángel aterrador, salvador de pecadores, Dios es MI AYUDANTE. Woah Woah!

 

  • Realmente no me siento bien, y estoy realmente tentado a quejarme … ¡pero Dios es mi ayudante! Él puede curarme, o darme el poder de no quejarse, o ambos.
  •  

 

  • A mi hijo no le está yendo bien espiritualmente, y estoy al límite … ¡pero Dios es mi ayuda! Él puede derretir el corazón duro de mi hijo y darme sabiduría para navegar en cada situación difícil.
  •  

 

  • Mi compañero en este proyecto escolar no está haciendo nada, y quiero golpearlo en la cara … ¡pero Dios es mi ayudante! Me puede dar diligencia, paciencia y amor.
  •  

 

  • Mis hijos corren por la casa, orinan en el piso y, en general, me vuelven loco … ¡pero Dios es mi ayuda! Él puede darme un amor de otro mundo por estos niños de alta velocidad.
  •  

 

  • He pecado de la misma manera una y otra y otra vez … ¡pero Dios es mi ayudante! Él promete que el pecado no tendrá dominio sobre mí. Él me dará poder para vencer este pecado.
  •  

 

No hay situación demasiado grande para Dios. No hay corazón demasiado duro para Dios. No hay presupuesto demasiado ajustado para Dios. No hay jefe demasiado difícil para Dios. Dios es tu ayudante! El es mi ayudante! Esas cuatro palabras cambian cada situación.

 

¿Necesitas sabiduría hoy? Dios es tu ayudante. ¿Necesitas fuerza hoy? Dios es tu ayudante. ¿Necesitas paciencia hoy? Dios es tu ayudante. Si Dios es su ayudante, eso lo cambia todo.

                         


Deja una respuesta